Responde Belén Alarcón
¿Cómo planificar la jubilación en la era de la longevidad?
Buenos días. ¿Hasta qué punto merece la pena depositar nuestro dinero en un plan de pensiones y no en otro producto financiero que nos pueda dar más rentabilidad? Gracias por su respuesta.
Buenos días, gracias por su pregunta
El plan de pensiones es un vehículo financiero a través del cual puedes acceder a todos los tipos de activos (activos del mercado monetario, renta fija y renta variable) lo que significa que, a priori, puedes aspirar a obtener las mismas rentabilidades que en otros productos financieros con un perfil inversor similar y, además, hacerlo con una mejor rentabilidad financiero-fiscal. Por ejemplo, un plan de pensiones de renta variable española puede darte una rentabilidad similar a un fondo de inversión de renta variable española o una cartera de acciones de la bolsa española.
Hay planes de pensiones que son muy buenos. La prueba es que los 10 planes de pensiones de renta variable más rentables obtienen un 5% de rentabilidad anual media superior a los 10 planes de pensiones más populares. Sin embargo, según datos de INVERCO, los más rentables solo tienen el 4% de las aportaciones mientras que los más populares acumulan el 70% de las aportaciones.
Cuando uno mira los datos agregados, el enorme peso histórico de los activos monetarios y de renta fija, hace que las rentabilidades no sean muy boyantes. Es una realidad que un amplio porcentaje de planes de pensiones tienen costes elevados y rentabilidades exiguas, no tanto debidas a las comisiones (afectan principalmente a los planes conservadores) como a una gestión pobre.
Sin embargo, si uno busca, encuentra muy buenos productos, para distintos perfiles de riesgo. Estos planes son menos conocidos y sus buenos resultados no tienen mucho impacto en el sector porque suelen ser de gestoras independientes, con menor red de distribución. Planes buenos, haberlos, haylos de modo que la pregunta no sería tanto si los planes de pensiones son buenos como vehículo sino cuáles deben ser nuestros criterios de elección del plan de pensiones.
Un ejemplo, si mira la rentabilidad del mejor plan de pensiones de renta variable global a 10 años en Morningstar, (Abante Bolsa PP +9,21% anualizada) y la los últimos clasificados en ese periodo, la diferencia es de entre 5 y 9 puntos porcentuales cada año.
Buenos días, tengo 43 años y aporto 150 € al mes a un plan de pensiones de empresa privado desde el año 2002. Cotizo por la base máxima y empecé a trabajar en el año 1999. Nunca he dejado de hacerlo
¿A qué edad me podré jubilar con la máxima prestación?
¿Las aportaciones mensuales son razonables?
Buenos días, gracias por su pregunta
Con respecto a su primera pregunta, a sus 65 años tendrá más de 38,5 años cotizados lo que significa que, según la legislación actual, recibiría la pensión máxima desde esa fecha si, además, desde ahora a sus 65 años estuviese cotizando por la base máxima que, actualmente, asciende a 45.604 euros. Incido en que esto sería así si el sistema actual de pensiones se mantuviese vigente en su jubilación y eso no parece el escenario más probable.
Con respecto a su segunda pregunta, si continuase ahorrando 150 euros mensuales hasta su jubilación, el capital que usted podría tener ahorrado en planes de pensiones a sus 65 años, neto de impuestos, podría oscilar entre 70.000 euros -con una rentabilidad del 2% anual media- y 180.000 euros – con una rentabilidad del 6% anual media. Lo que significa que, suponiendo que su esperanza de vida pudiera ser de 95 años, podría complementar su pensión pública con una renta anual, durante 30 años, de entre 3.000 euros (al 2% de rentabilidad) y 12.000 euros (al 6% de rentabilidad).
Muy buenos días.
¿No le parece que después de casos como Abengoa, Pescanova, DIA, Duro Felguera, Dermostética, preferentes, rentabilidades negativas en la mayoría de productos financieros y la CNMV mirando hacia otro lado es muy difícil que la sociedad española se decante por ahorrar en productos financieros?
Buenos días, gracias por su pregunta
Una de nuestras principales recomendaciones a la hora de invertir es hacerlo de manera global y diversificada, con un enfoque de largo plazo y una gestión profesional y, para ello, pensamos que el fondo de inversión es el mejor vehículo.
La concentración en productos como los que menciona conlleva grandes riesgos. El fondo de inversión permite diversificar su inversión, tanto por tipo de activo como por zona geográfica, y no depender únicamente de uno de los valores arriba indicados.
Hoy en día para obtener una rentabilidad hay que asumir algún tipo de riesgo, ya que los tipos libres de riesgo están en 0. Esto implica que en el corto plazo y dependiendo de las condiciones de mercado se puedan obtener pérdidas, pero el plazo es el mejor aliado de un inversor.
¿A partir de qué edad sería conveniente empezar a ahorrar en vista a la jubilación?
Buenos días, gracias por su pregunta
No hay una edad concreta para empezar a ahorrar para nuestra jubilación, si bien cuanto antes comencemos a ahorrar y a invertir, mejor.
Ahora bien, empezar a ahorrar pronto no es suficiente. Hay otra variable que también incide significativamente en nuestro plan financiero para la jubilación que es la elección del perfil de riesgo y, consecuentemente, de la rentabilidad esperada.
Veamos ambos conceptos con un ejemplo. Supongamos que queremos hacer un plan de ahorro e inversión para garantizarnos 2.000 euros mensuales + IPC de los 67 años a los 100 años y la pregunta que nos hacemos es: ¿cuánto tengo que ahorrar?
La respuesta sería diferente según el año en el que se empieza a ahorrar y la rentabilidad de la cartera que esperamos obtener.
Comenzar a los 25 años y tener un objetivo de rentabilidad del 2% nos exigiría ahorrar 18.850 euros anuales, mientras que con un objetivo de rentabilidad del 4% necesitaríamos ahorrar la mitad (9.000 euros al año) y con un objetivo del 6% menos de un tercio (4.300 euros al año)
Si hubiéramos empezado a los 45 años el esfuerzo de ahorro se duplicaría (36.000 euros al año invirtiendo al 2%, 21.500 euros al año invirtiendo al 4% y 13.000 euros al año invirtiendo al 6%)
Si todas estas cifras de ahorro e inversión le parecen abrumadoras, hay otra alternativa que cada vez será más frecuente: jubilarse más tarde.
¿Considera que con los tiempos de inestabilidad actuales y que se avecinan con una Europa en pleno cambio, y guerras comerciales entre grandes potencias los fondos de inversión generarán beneficios por encima de la inflación?
Buenos días, gracias por su pregunta
Echando un ojo al pasado probablemente nunca encontremos un periodo de estabilidad en el que sea claro invertir. Siempre ha habido factores de inestabilidad que han generado volatilidad y, precisamente, esto es lo que justifica la rentabilidad.
Hoy en día, más que nunca, no hay rentabilidad si no asumimos un riesgo, ya que los tipos de interés en Europa se sitúan en el 0%. Muchas veces vemos riesgos como binarios y la realidad es que muchas veces también nos equivocamos. Recuerde que, no hace tanto, muy poca gente veía a Donald Trump como presidente de Estados Unidos o a Reino Unido abandonando la Unión Europea y, sin embargo, ambas situaciones que parecían improbables en su día hoy son una realidad. Y los mercados se han recuperado de ello, de hecho, con la victoria de Trump, Wall Street encauzó su rally.
A futuro no todos los fondos de inversión obtendrán rentabilidades positivas, ya que depende del activo en el que estén invertidos, por lo que, cuidado con generalizar en “fondos de inversión”.
En nuestra opinión para obtener retornos por encima de la inflación en el futuro hay que asumir riesgo en renta variable, ya que, debido a la actividad de los bancos centrales, los tipos están excepcionalmente bajos, por lo que obtener retornos en renta fija se ha convertido en algo muy difícil. El inversor debe saber que esto implica más volatilidad y que es una circunstancia del mercado actual.
Tenemos claro que contando con plazo y dependiendo del perfil de riesgo que asuma, el inversor alcanzará su rentabilidad objetivo. Es importante tener en cuenta que siempre habrá incertidumbre y volatilidad en los mercados. Nadie tiene la bola de cristal para saber qué va a suceder en el mundo y cómo lo van a recibir los mercados.
¿Qué le parece la idea de combinar la percepción de ingresos al seguir trabajando y el cobro de la prestación de jubilación mientras se pueda y se tengan ganas?
Buenos días, gracias por su pregunta
Tanto la jubilación activa, como la jubilación parcial nos parecen opciones muy razonables y ventajosas.
Aunque nos cueste creerlo, tener vidas centenarias ya no es ciencia ficción. Cada vez vivimos más años -la esperanza de vida se ha duplicado en España en el último siglo, lo que nos sitúa como el segundo país más longevo del mundo- y, además, lo hacemos en mejores condiciones. La realidad es que vamos a llegar a la jubilación más activos y con más ganas de hacer cosas.
Vivir más años, implica, inevitablemente, tener jubilaciones más largas, lo que nos va a llevar a plantearnos nuestra vida de una forma diferente a la que habíamos pensado, tanto en el terreno personal, como en el laboral y en el financiero.
La jubilación será una etapa de reaprendizaje, de emprender, de apostar por una segunda carrera profesional, de recrearnos. Tendremos vidas multietapas en las que seguir trabajando y recibiendo parte de la pensión es una opción que debemos barajar.
Con un capital de 600.000€ y una edad de 56 años, siendo funcionario del grupo A (Licenciado), ¿podría planificar mi jubilación?
Buenos días, gracias por su pregunta
Por supuesto que sí, no solo puede, sino que debe hacerlo, ya que se encuentra en un momento perfecto para empezar a planificar. Lo primero que se tiene que preguntar son los objetivos que se plantea para su jubilación y el nivel de vida que deseará tener.
A partir de ahí, una planificación financiera le ayudará a determinar la pensión que puede esperar de Clases Pasivas si sigue cotizando hasta su jubilación y el perfil de riesgo que tiene que asumir en sus inversiones para alcanzar sus objetivos.
Con la información que nos ofrece -que habría que completarla- podría recibir una pensión del Estado del entorno de 36.608 euros/año (máxima) si se jubila a partir de los 60 años con un mínimo de 35 años cotizados.
En lo que se refiere a su ahorro, en un escenario de rentabilidad del 2%, con sus 600.000 euros, jubilándose a los 65 años y no generando nuevo ahorro, podría obtener una renta mensual actualizada con la inflación de entre 2.000 euros + IPC y 1.500 euros + IPC según su esperanza de vida (90 años o 100 años)
Si ese escenario de rentabilidad fuese del 5%, podría obtener una renta mensual actualizada con la inflación de entre 3.600 euros + IPC y 2.900 euros + IPC según su esperanza de vida (90 años o 100 años).
Tengo 33 años y soy mileurista, no tengo cargas familiares y tengo un plan de ahorros desde hace un año al cual hago aportaciones de 200 euros, es muy conservador. Mi pregunta es si hay otras opciones mejores para que me dé más rentabilidad asegurada, por lo menos para cubrir la inflación. Ahora me da una rentabilidad del 1,8%.
Buenos días, gracias por su pregunta
Con 33 años, la ventaja que tiene es que cuenta con un gran horizonte temporal de cara a ahorrar para cuando se jubile y esto, como le comentábamos a Celia, siempre le va a beneficiar.
Tener más tiempo le va a permitir lograr sus objetivos de rentabilidad más fácilmente, ya que, al contar con un largo periodo de tiempo, va a poder asumir más riesgo con sus inversiones, sin necesidad de incrementar su esfuerzo de ahorro anual. Así, en su caso, el hecho de hacer aportaciones pequeñas se compensaría al estar más tiempo invertido y asumir más riesgo con su plan de pensiones.
Por eso, mi recomendación es que durante los primeros años de inversión -cuando todavía cuenta con más de 30 años para jubilarse- apueste por un plan de pensiones que invierta la mayor parte de la cartera en renta variable global y que lo haga, siempre de forma diversificada, tanto por sectores como por regiones. Es decir, le recomendaría que ahora fuera menos conservador con su inversión, de forma que cuando se vaya acercando a la edad de jubilación vaya reduciendo el riesgo, primero, a un plan mixto para, más adelante, optar por uno más conservador para cubrir, al menos, la inflación. Y aquí debe saber que puede traspasar los derechos consolidados de su plan de pensiones sin necesidad de tributar por ellos.
En cuanto a las opciones, el abanico es muy amplio. Por ello le aconsejo que antes de decantarse por un determinado producto haga un ejercicio de planificación financiera para saber qué objetivos tiene para la jubilación, de forma que pueda cuantificar el importe final que va a necesitar y su situación de partida. De esa forma podrá saber qué rentabilidad objetivo le tiene que exigir a los mercados financieros.
Una vez realizado este ejercicio, que lo podrá hacer con la ayuda de un asesor financiero, será el momento de elegir el producto de inversión que, en términos de comisiones, operativa, posibilidades de rentabilidad y riesgo, y también por fiscalidad, sea el más eficiente para usted en la etapa en la que se encuentra actualmente.
¿Cómo hacer ante un comienzo tardío en las aportaciones? Es decir, ¿cómo empezar con pocos recursos y mucha edad para lo que nos ocupa (62 años)? Gracias
Buenos días, gracias por su pregunta
Para muchos de nosotros, financiar una jubilación más larga y con una menor financiación del Estado va a ser algo prácticamente impensable.
Necesitamos desvincular la edad legal de jubilación de los 65 años y vincularla a nuestro estado de salud y al incremento de la esperanza de vida.
Para nuestros padres, la edad de jubilación era a los 65 años, pero para nosotros, que vivimos, de media, 20 años más, debería ser a los 80 años. Y, aun así, jubilándonos a los 80, dispondríamos de un periodo de jubilación similar al que han tenido nuestros padres, de unos 15 a 20 años. Y esto es así por el efecto de la longevidad y el incremento de la esperanza de vida, que se incrementa seis horas cada día. Es decir, vamos a vivir más años que nuestros padres y lo vamos a hacer en mejores condiciones de salud. Aunque por el momento nos resulte improbable, es muy probable que muchos de los que están leyendo este encuentro lleguen a vivir cien años.
En este escenario, si a los 65 años no disponemos del capital que necesitamos para financiar el nivel de vida que necesitamos (una situación que cada vez será más común) tenemos otra alternativa, que es jubilarnos más tarde. En países como Estados Unidos esto ya es una realidad y cerca del 30% de las personas mayores de 65 años siguen trabajando.
Si está interesado en profundizar en ello le sugiero dos recomendaciones:
Primero, que realice un Financial Life Planning que le ayude a tener una visión más creativa del futuro y, al mismo tiempo, a realizar un plan financiero acorde a sus prioridades y necesidades de los 40 años de vida que le pueden quedar.
Mi segunda recomendación es que lea el libro “La Vida de 100 años”, escrito por los profesores de la London Business School, Lynda Gratton y Andrew Scott.
¿Es mejor jubilarse este año o para el próximo teniendo 15 años cotizado y derecho a una jubilación parcial? Tengo 67 años
Buenos días, gracias por su pregunta
La jubilación parcial puede ser sin contrato de relevo o con contrato de relevo.
Entendiendo que usted no tiene contrato de relevo y tiene la opción de acogerse a la jubilación parcial, le aconsejaríamos tomar la decisión de acogerse a la misma y jubilarse el año que viene para continuar generando rentas (tanto por su trabajo y por la pensión de la Seguridad Social) un año más. La jubilación parcial es una opción muy ventajosa para alargar la vida laboral mientras usted recibe parte de la pensión de la Seguridad Social.
Hola me llamo Roberto Vera. Desde el 2009 estoy cotizando a la Seguridad Social. Ahora tengo 58 años y quiero saber si me queda una paga cuando cumpla los 65 o 67. También querría saber cómo ahorrar desde ahora que estoy trabajando. Gracias, espero tu respuesta.
Buenos días, gracias por su pregunta
En relación con la pensión de la Seguridad Social, si suponemos que se jubila a los 67 años y que, hasta ese momento, sigue cotizando, sí que habría generado el derecho a recibir la pensión de la Seguridad Social dado que los requisitos son:
- Tener un mínimo de 15 años cotizados (usted llegará con 18 años cotizados a los 67).
- Tener dos años cotizados en el plazo de los últimos 15 desde su jubilación (algo que cumpliría).
- Haber cesado en la actividad laboral (también o cumpliría).
Si usted tiene un sueldo inferior a la base máxima (45.644 en 2018) podría recibir una pensión del entorno de 18.000 euros brutos anuales, es decir, aproximadamente la mitad de la pensión máxima actual (36.608 euros).
Si, por el contrario, su sueldo es inferior a la pensión máxima, recibiría una pensión similar al 44% de su sueldo.
Todo ello, suponiendo que se mantiene el sistema actual de pensiones y sin haber aplicado el factor de equidad intergeneracional que, en su caso, podría reducir su pensión entre el 5% y 6%
Buenos días, necesito que alguien me convenza de las mínimas rentabilidades (por no decir ninguna) que aportan los planes de pensiones incluidas comisiones que son en algunos casos vergonzosos y si no fuera por la bonificación de hacienda no me convencen; siempre pensé que la mejor jubilación la aportaría un piso alquilado, local comercial o algún producto similar, ¿qué le parece?
Buenos días, gracias por su pregunta
Como ya he comentado previamente, no conviene generalizar cuando hablamos de la rentabilidad de los planes de pensiones. Los hay buenos y malos.
Así, por poner un ejemplo con los planes de pensiones de renta variable, si nos fijamos en los datos de INVERCO, los 10 planes de pensiones de renta variable más rentables obtienen un 5% de rentabilidad anual media superior a los 10 planes de pensiones más populares. Sin embargo, aun siendo esto así, los planes más rentables solo tienen el 4% de las aportaciones mientras que los planes más populares acumulan el 70% de las aportaciones.
Por tanto, como también comentaba antes, la pregunta no sería tanto si los planes de pensiones son buenos como vehículo, sino cuáles deben ser nuestros criterios de elección del plan de pensiones: si el regalo que nos hace nuestra entidad financiera por traspasarlo a una lista cerrada de sus productos o los buenos resultados en términos de rentabilidad y riesgo.
Mi recomendación es que primero haga un sencillo ejercicio de planificación financiera que le ayude a entender cuál es el objetivo de rentabilidad que hace equivalente el ahorro que tiene con el capital que va a necesitar y, una vez que ya sabe si necesita un 2% o un 6%, busque asesoramiento con el objetivo de seleccionar los planes de pensiones que para su objetivo de rentabilidad mejor lo han hecho en términos de rentabilidad y riesgo.
Con respecto a invertir en pisos, mi recomendación es que hay que hacer bien los números cuando calculamos la rentabilidad que nos ofrecen vía alquiler o venta del activo e incluir todos los gastos del inmueble y los impuestos.
¿Qué manera es mejor para realizar el rescate de un plan de pensiones?
Buenos días, gracias por su pregunta
Los planes de pensiones se pueden rescatar en forma de renta, de capital, de forma mixta o de manera libre.
El rescate tributa como renta del trabajo, por lo que la forma más adecuada de rescatar nuestro dinero va a depender siempre de la situación personal y familiar de cada uno. Por ello, hay muchos factores que se deben tener en cuenta, como, por ejemplo, si necesita el dinero en ese momento o si desde el punto de vista fiscal le resulta beneficioso o no, teniendo en cuenta el resto de las rentas que posee.
Las aportaciones realizadas antes de 2006 que se rescaten en forma de capital tienen derecho a una reducción del 40%. Dicha reducción, desde 2015, se encuentra limitada en el tiempo. Aunque habría que analizar cada caso de manera particular, podríamos decir que, en muchos casos, cuando existen aportaciones antes de 2006, resulta adecuado rescatar en forma de capital las aportaciones realizadas antes de 2006 y en forma de renta las posteriores a 2006.
Por otro lado, si el inversor no va a tener necesidad de utilizar el dinero invertido en el plan de pensiones a lo largo de su vida, una de las posibilidades sería dejarlo para sus beneficiarios, difiriendo el impacto fiscal al momento en que estos últimos lo rescaten. Y si lo va a necesitar, y tiene años en los que no genera ingresos, puede rescatar entre 6.000 euros y 12.000 euros sin necesidad de tributar por la reducción por rentas del trabajo y mínimos personales y familiares, previstos en el IRPF.
Si quiere una recomendación personalizada, tendría que facilitarme datos relativos a su edad, años cotizados a la Seguridad, régimen y base de cotización, edad de jubilación y cuáles son sus ingresos. Desde Abante, trabajamos la situación personal de cada cliente para asesorarle en su situación concreta.
Tengo 54 años, ¿qué porcentaje de mi fondo de pensiones piensas debería estar en renta variable?
Buenos días, gracias por su pregunta
Como ya comentaba previamente, mi recomendación es que, antes de elegir un producto de inversión concreto, realice un ejercicio de planificación financiera que nos ayude a saber: de cuánto tiempo disponemos, cuál es nuestro punto de partida -es decir, cuánto tenemos ya ahorrado y cuánto podemos ir ahorrando- y para qué queremos el dinero.
Este ejercicio de planificación financiera nos va a permitir cuantificar nuestros objetivos para saber cuál es nuestro déficit – la diferencia entre lo que necesitamos y lo que tenemos – y, en consecuencia, cuál es la rentabilidad objetivo que le tenemos que pedir a los mercados financieros y cuál va a ser nuestro perfil de riesgo.
Nuestro objetivo de rentabilidad y el horizonte temporal de la inversión es lo que va a determinar cómo tenemos que invertir nuestro dinero y qué proporción de renta variable debería tener nuestra inversión, para así lograr el capital final que deseamos.
No es lo mismo necesitar un 2% que un 6%, igual que no es lo mismo necesitar el dinero ahorrado en planes de pensiones a los 65 años que a los 80 años, todo ello según el plan que hayamos establecido.
En cualquier caso, a falta de realizar este ejercicio, en su caso, al tener en cuenta que su horizonte temporal puede ser de más de 10 años, le recomendaría un plan de pensiones que, como mínimo, tenga un 50% en renta variable, invertido, siempre, de forma diversificada a nivel mundial. En el escenario de inversión actual, los activos conservadores podrían tener rentabilidades inferiores a la inflación y eso es otra manera segura de perder dinero.
¿Cómo puedo movilizar el dinero que ahorrado pagando mi casa sin que tenga que dejarla?
Buenos días, gracias por su pregunta
Una alternativa es vender la nuda propiedad de su casa y reservarse el usufructo vitalicio, lo que le otorgaría el derecho a vivir en ella hasta su fallecimiento.
Por ejemplo, si tiene 75 años y una casa valorada en 300.000 euros. Los números serían:
1. Valor económico del usufructo vitalicio = 89 – 75 = 14% de 300.000 euros = 42.000 euros
2. Valor de la nuda propiedad -parte que se vende- = 300.000 – 42.000 euros = 258.000 euros
En el ejemplo descrito, se recibirían 258.000 euros sobre un valor de la casa de 300.000 euros, manteniendo al mismo tiempo el derecho a vivir en ella hasta el fallecimiento.
Otra opción sería hacer una hipoteca inversa, si bien la oferta actual es escasa y en muchos casos, con costes elevados.
Buenos días. Creo que los planes de pensiones son cada vez menos atractivos porque lo que se gana ahora se pierde cuando más se necesita el dinero. ¿Qué productos de ahorro recomiendas en su lugar? Muchas gracias.
Buenos días, gracias por su pregunta
Los planes de pensiones, como cualquier otro producto de inversión, hay que escogerlos en función de las necesidades propias de cada uno. Como ya he comentado, es importante comparar los diferentes productos que hay en el mercado, para ver qué rentabilidades ofrecen.
En cuanto a lo que mencionaba sobre su beneficio fiscal, hay que tener en cuenta que cuando aportamos a los planes de pensiones y nos podemos deducir hasta un máximo de 8.000 euros, es en nuestra etapa de trabajo, cuando nuestro tipo aplicable es mayor. Al rescatar el plan, es cuando tributamos, momento en el que nuestro tipo marginal suele ser inferior puesto que ya estamos jubilados.
La ventaja con este producto se encuentra en que lo que nos vamos ahorrando cada año de pagar a Hacienda lo podemos ir invirtiendo para multiplicar nuestro importe final.
Actualmente tengo tres fondos de pensiones y no hago aportaciones mensuales ya que mi sueldo no me lo permite. ¿Qué cantidad recomienda usted meter cada mes? Gracias.
Buenos días, gracias por su pregunta
No hay una cifra exacta para aportar mensualmente a un plan de pensiones. Si bien lo recomendable es aportar -en el conjunto del año- hasta el máximo deducible fiscalmente – la menor de estas dos cantidades: 8.000 euros o el 30% de los rendimientos netos del trabajo-, la cifra variará en función de las capacidades y las necesidades de cada inversor.
Además, realizar aportaciones mensuales también es una buena estrategia para obtener una rentabilidad consistente, liberarnos de las modas y evitar los momentos de pánico.
Dejar la aportación para diciembre -el 55-60% de las aportaciones anuales se realizan en el último trimestre y, particularmente en diciembre- a largo plazo, en una inversión en renta variable, puede suponer un 2,5% menos de rentabilidad anual.
Buenos días Belen.
¿A quién puedo acudir en busca de ayuda profesional para una planificación financiera de mi jubilación? En el mundo anglosajón es muy fácil, pero en España no. Tengo 58 años, me acabo de prejubilar y dispongo de un capital ahorrado de 2,5 M€
Buenos días, gracias por su pregunta
En Abante llevamos más de 17 años realizando ejercicios de planificación financiera a nuestros clientes y ya hemos realizado más de 6.000 Financial Life Planning.
Hacer un ejercicio completo de planificación financiera le ayudará a contextualizar mejor su dinero en su vida y, precisamente, de eso trata. Nosotros entendemos el dinero como el medio que te ayuda a conseguir lo que es más importante para ti y no como un fin en si mismo.
El servicio de Financial Life Planning empieza por definir un plan personal que incluya todo lo que es importante en su vida y la de su familia para, en segundo lugar, definir un plan de ahorro e inversión que le ayude a conseguirlo.
Esta metodología que en Abante denominamos como “una planificación financiera bien hecha” requiere por tanto empezar por la persona y preguntarse: ¿qué quiero hacer en cada una de las etapas de mi vida?, ¿cuáles son mis objetivos personales y profesionales? para, a continuación, y una vez que hemos visualizado nuestro futuro y nos hemos ilusionado con él, hacer unos números que respondan a la pregunta: ¿cuál es el plan de ahorro e inversión que me permitirá conseguirlo?
Buenos días, soy español de 44 años y desde el año 2014 soy no residente fiscal en España, anteriormente he cotizado en España durante 18 años por el máximo y mantengo un convenio con la seguridad social actualmente solamente por el menor de los importes. Me recomendaría planificar mi futura pensión y jubilación incrementando el convenio hasta el máximo? Cuando considera que sería conveniente realizarlo para poder acceder al máximo de mi pensión teniendo en cuenta mi edad y años cotizados actualmente (22 años)? Me recomendaría otro tipo de producto o planificación teniendo en cuenta que dispongo de posibilidad de ahorro en lugar del convenio de la seguridad social o compaginar convenio a la seguridad social por el máximo con otro tipo de producto financiero? Gracias de antemano.
Buenos días, gracias por su pregunta
Si usted mantiene un convenio al mínimo con la Seguridad Social y lleva 22 años cotizados, teniendo en cuenta que siguiera así hasta su edad legal de jubilación (en su caso 65 años), la pensión que recibiría rondaría los 11.000 euros.
Antes de decidir subir la base al máximo, sería conveniente estudiar si el país donde está cotizando actualmente tiene convenio con España de Seguridad Social para ver cómo le computarán sus años cotizados fuera de España. Si no fuera el caso, podría subir la base de cotización a una base media o al máximo para optimizar su pensión futura. Otra opción es hacer un plan de ahorro alternativo privado en vez de canalizar esos ahorros a la Seguridad Social.
Buenos días.
Tras un ERE de una entidad financiera y pasados dos años de paro ya no tengo más renta del trabajo que los 8000 euros de aportación que mi empresa sigue realizando a mi plan de pensiones.
Como en IRPF la deducción por aportaciones está limitada al 30% del rendimiento neto del trabajo (8000 - 2000 deduccion = 6000 * 30% = 1800 de límite) resulta que tributo sobre 6200 este ejercicio 2018 y vuelvo a tributar sobre 8000 en el ejercicio en el cual rescate el plan de pensiones.
No tiene sentido salvo que haya algo que se me escape.
Os agradezco cualquier aclaración al respecto.
Saludos cordiales
Buenos días, gracias por su pregunta
Efectivamente, la aportación de su empresa al plan de pensiones se considera rendimiento del trabajo y deberá tributar por la misma mientras le sigan aportando.
Cuando rescate el plan de pensiones, tendrá que pagar impuestos por la renta que opte rescatar como rendimiento del trabajo, que tributará en función de la rentas que vaya a obtener una vez cumpla alguna contingencia o supuesto excepcional de liquidez; si consideramos que se acoge a la contingencia de jubilación, habrá que tener en cuenta también la parte de la pensión de la Seguridad Social u otras rentas que pueda tener.
Todo lo que leo sobre porcentaje de los ingresos que habría que dedicar al ahorro para la jubilación está muy bien sobre el papel, pero, ¿y qué pasa para quien no puede ahorrar ni 20 euros al mes? Cobro poco más de 1.000 euros, y más del 70% se me va en alquiler y gastos. Y miro en mi entorno y no soy una excepción. ¿Hay algo que hacer en estos casos, o estamos abocados a tener una mala vejez?
Buenos días, gracias por su pregunta
Como comentaba previamente, con vidas más largas, el abanico de alternativas para planificar la jubilación debe ser más amplio. Debemos ser conscientes de que vamos a vivir mucho más de lo que habíamos pensado –cien años, en muchos casos-, y eso nos obliga a mirar al futuro de una manera más creativa y a replantearnos nuestro proyecto personal, financiero y laboral.
Según el esquema tradicional -aprendido de las generaciones que nos preceden- hay que estudiar mucho hasta los 23 años, trabajar mucho hasta los 60-65 años y luego financiar una jubilación que, con respecto a la de la generación de cuando se fijaron los 65 años como edad de jubilación, se ha triplicado (de 8 años a 23 años) y, además, continúa incrementándose cada día que pasa (añada 3 años por cada década que le queden hasta los 83 años).
Financiar un periodo que va a ser tres veces más costoso, con unas pensiones que apuntan a ser inferiores y con unas rentabilidades muy bajas de los activos sin riesgo, nos lleva a cambiar nuestros hábitos de ahorro y de inversión. Si seguimos anclados en jubilarnos a los 65 años, para financiar nuestra jubilación solo tendremos dos opciones: ahorrar mucho más cuando trabajemos o asumir más riesgo con nuestras inversiones.
Y como estas dos opciones resultan impensables para muchas personas, la opción que encontramos es la de jubilarnos más tarde. Además, en la era de la longevidad, vamos a llegar a los 65 años mucho más activos y con más ganas de hacer cosas, por lo que podremos apostar por una segunda carrera profesional, por reinventarnos o por fórmulas que nos permitan compatibilizar la pensión de jubilación con nuestros trabajos, como la jubilación flexible o activa.
Para quienes se sientan más identificados con esta alternativa, algunas recomendaciones a este respecto y relacionadas con tener una carrera profesional más larga son: continuar formándonos a lo largo de toda la carrera profesional y cuidar nuestra salud para llegar con fuerzas a los 65 años.